La Nintendo Switch es una consola fantástica… excepto por un pequeño detalle: el Joy-Con Drift. El problema de fábrica de los Joy-Con significa que los controles de la Switch en algún momento de su vida comenzarán a presentar problemas con sus palancas (a veces con menos de un año de uso). Sin embargo, parece que Nintendo ha encontrado una solución que podría aplicar a su Switch 2 o los controles profesionales que lance en un futuro.
Esta semana se reveló que Nintendo patentó el diseño de un Joy-Con con joystick magnéticos que utilizan ‘líquidos inteligentes’. La teoría es que estas palancas contarían con un fluido llamado ‘magnetorheological fluid’ o MRF por sus siglas en inglés que puede cambiar de viscosidad dependiendo de la intensidad del campo magnético.
Lo que esto permitiría es que el líquido cree una resistencia mucho más viscosa cuando la persona esté moviendo la palanca, pero pase a ser un líquido cuando el joystick regrese a su posición original si el jugador quita sus dedos encima. Lo que esto permitiría es evitar una de las principales causas del Joy-Con Drift hoy y son partes conectadas que terminan generando movimientos no deseados. Lo otro que evitará es que el joystick regrese mucho más rápido a su posición original lo que significa mejores tiempos de respuesta.
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Por ahora no está claro en dónde podría aplicar Nintendo esta tecnología o incluso si se trata de una solución que vayamos a ver en su siguiente generación de consolas. Costaría creer que la Switch 2 saldrá al mercado sin ofrecer una solución al principal problema de la consola original y uno que le terminó costando a Nintendo un par de demandas y reparaciones sin costo. También significó que parte del legado de la Switch está asociado con uno de los peores controles (al menos en lo que a vida útil respecta) que hemos visto en años recientes.
Sabemos que la Switch 2 está en camino y que Nintendo ya mostró una versión de prototipo a ciertos desarrolladores hace unas semanas. Aunque la mayoría de mejoras que hemos conocido están más cercanas a rendimiento (más FPS al momento de correr juegos con gráficos más demandantes) no sorprendería que la patente indique los intentos de la compañía para garantizar que su próxima generación de controles será un poco más resistente. Por desgracia esta es una pregunta que no podremos responder hasta 2024 cuando la compañía (con un 80% de seguridad) presente al sucesor de la Nintendo Switch.
Imágenes: Nintendo
