Uno de los frentes en los que se han empeñado las compañías de videojuegos en los últimos años son los de seguridad y privacidad. Justamente, se han establecido algunas reglas que vetan o castigan el contenido y lenguaje inapropiado. Esta vez, Xbox está integrando una nueva función de denuncias de voz para reportar el lenguaje inapropiado.
En julio del presente año, Microsoft anunció la función de denuncia de voz abusiva para las consolas Xbox. Esta iniciativa permite que los jugadores graben un clip de 60 segundos con el lenguaje inapropiado que escuchan mientras juegan títulos multijugador. Luego de grabar el clip, el jugador tiene un plazo de 24 horas para completar el informe.
De acuerdo con la compañía, los nuevos informes de voz están adecuados de manera equilibrada para que se escuche mínimamente interferencia en los juegos. Eso sí, la denuncia de voz solo se puede hacer en tiempo real. Es decir, el jugador puede grabar el clip de hasta 60 segundos dentro del apartado dispuesto para ello. De esta manera, Xbox asegura que el clip no queda guardado en la consola y que solo se pueden denunciar audios grabados en tiempo real. Esto se traduce en que la consola no guardará ni cargará un clip a menos de que de inicie el proceso de informe.
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Después de grabar el clip, este permanecerá en la consola durante “24 horas en línea”. El jugador decide si envía el reporte de una vez o espera a finalizar la partida; la consola te mostrará un mensaje cuando el tiempo esté a punto de expirar. «Nuestra función está diseñada para que solo usted, el jugador, pueda iniciar la captura de los últimos 60 segundos de actividad de juego que ocurrió con fines de moderación de contenido», escribió la compañía en su comunicado.
La función de denuncias de voz se empezará a implementar en la actualización de septiembre para los Xbox Series X/S y Xbox One. Sin embargo, llegará por ahora a algunos países de habla inglesa: Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Irlanda, Australia y Nueva Zelanda. Se espera que sea cuestión de semanas o meses para que llegue a esta parte del mundo.
Imagen: Mahdi Bafande
