La historia de Twitman, o cómo cambiar el mundo a través de Twitter

La gente usa Twitter para todo: para opinar, para conocer gente, para ‘levantar’ o para criticar. A Gilber Garzón y Daniel Cabrera, estudiantes universitarios, le extrañaba que la gente lo usara tan poco para ayudar. Por eso decidió hacer la tarea con tres amigos, y para darse a conocer se inventó un personaje: Twitman, una especie de Superman de las redes sociales.

Eso fue hace meses. Hoy, se han convertido en los recipientes favoritos de las ayudas que donan los usuarios colombianos de redes sociales. Lo que hacen es, básicamente, acudir cuando alguien tiene algo para donar. Van a donde esté el material, lo reciben y lo llevan a su destino respectivo. En diciembre, por ejemplo, entregaron regalos a 150 niños de una fundación en Bogotá.

Llevaban meses buscando las ayudas, pero la tarea no había sido fácil. En noviembre, cuando hablamos con Gilber por primera vez, nos contaba que estaba preocupado porque no había alcanzado a completar los regalos para todos los niños. Al final, lo lograron: «Empezamos a mover esto con contactos influyentes en redes sociales. Tocamos puertas y nos ayudaron bastante, tanto que al final llegaron muchas ayudas y teníamos algunos regalos de más«, le contó a ENTER.CO.

Uno de esos contactos influyentes es Claudia Berbeo, una tuitera que tiene una opinión muy vehemente sobre ellos: «Daniel Cabrera y Gilber Garzón son héroes«. Por eso, Claudia se animó a pasar la voz sobre lo que Twitman hacía. «Hay muchas personas que no tienen voz en redes sociales. Es como darles voz a esas personas y ayudarles«, nos dijo.

Gracias a todo esto, ya no son solo cuatro ‘gatos’: en estos meses, varias personas han dicho que los quieren ayudar como voluntarios, y cuando necesitan de su ayuda los contactan. Incluso, una persona les dijo que quería llevar la iniciativa a Cartagena, una ciudad donde la pobreza extrema es vecina de los barrios más lujosos. Están ajustando todos los detalles para que comience la labor.  Si usted quiere ayudarlos, puede contactarlos en su Twitter o en su cuenta de Facebook.

Ahora, reciclaje.

Luego del éxito de la convocatoria de navidad, Twitman va a cambiar de dirección. «Vamos a recoger las cosas de reciclaje que tengan las personas en sus casas. Queremos poder llegar a colegios y a empresas que se animen a hacer sus aportes de materiales«, cuenta Gilber.

Seguro les va bien. Y seguro, el próximo año se meten a otra causa, o a varias de ellas. Lo importante para ellos no es eso. Es esto: «Queremos ayudar en muchos ámbitos, todo lo que pueda cambiar al mundo«, y lo están haciendo un tuit a la vez.