Ello, una red social que no quiere vender a sus usuarios

Si bien es gratuito para los usuarios, en su página afirman que algunas características serán pagas.
Si bien es gratuito para los usuarios, en su página afirman que algunas características serán pagas.
Si bien es gratuito para los usuarios, en su página afirman que algunas características serán pagas.

Llevamos casi diez años con Facebook y Twitter, dos redes sociales que hasta el momento, aunque hayan tenido alguna competencia, se han convertido en líderes del mercado. 

No obstante, hace poco salió a la luz otra red social que quiere oponerse totalmente a los modelos de estas dos redes sociales y su nombre es Ello. Ha sido llamada por muchos medios de comunicación como el ‘Anti Facebook’, como informó The Guardian. Uno de sus objetivos es ser una red social que visualmente sea bonita y para esto, cuentan con siete programadores y artistas.

Los creadores de Ello escribieron un manifiesto dedicado a los usuarios en el que afirman que “nosotros creemos que una red social puede ser una herramienta de empoderamiento, no tiene que ser un instrumento para engañar, coaccionar o manipular, pero sí puede ser un lugar para conectar, crear y celebrar la vida. Tú no eres un producto”.

Los fundadores de Ello se han comprometido a que el sitio nunca venderá los datos de los usuarios a los anunciantes o que estos deban pagar por suscribirse al servicio. The Guardian afirmó que la semana pasada tuvo un crecimiento muy alto, tanto que recibieron cada hora 35.000 invitaciones de usuarios para ser miembros de la red. El diseñador Todd Berger afirmó que “el bombardeo de tráfico que estamos teniendo ahora es inesperado y no lo habíamos planeado. En términos de nuevos registros, la cantidad de datos que estamos procesando es increíble”.

A pesar de que Ello es nuevo, ayer sufrió una caída y los usuarios no pudieron acceder a la red por más de 45 minutos. En su página oficial, Ello afirmó que sufrió un posible ataque DDoS, como reportó PCmag.

Una de las características de Ello es que para ser miembro se necesita una invitación de un usuario de la red social. Además, utiliza la herramienta de Google Analytics para recolectar los datos de los usuarios y de acuerdo a los creadores, “antes de que la información sobre el usuario sea almacenada en los servidores de Google, se elimina su dirección IP y se convierte en un anónimo”.

Sin embargo, si bien es gratuito para los usuarios, en su página afirman que algunas características serán pagas. Por esta razón, su modelo de negocio ha sido cuestionado por muchos expertos como el periodista Quinn Norton, quien afirmó para The Guardian que “Ello necesita ganar dinero y esto significa que eventualmente necesita cobrarle a alguien”.

Un fenómeno que se ha producido con el estreno de Ello es que varias personas que se identifican como LGBTQ se han pasado a esta red social como una forma de protesta contra Facebook, debido a que ésta última presionó a los ‘drag queen’ para que pusieran sus nombres legales en vez de sus nombres artísticos. Y aunque en su página afirmen que no admitirán el porno, señalan que muchas personas lo ven. Por esto, el desarrollador Justin Gitlin dijo en su Twitter que estarán abiertos a este tipo de contenidos y que simplemente cuando el usuario los comparta sólo debe indicar que es (NSFW).

Imágenes: Captura de pantalla.

10ch (vía Flickr). 

Ximena Arias

Ximena Arias

Desde pequeña, el diario El Tiempo llegaba a mi casa. Siempre sentí una curiosidad enorme por ese pliego de papel que mis tías, mi mamá y mi abuela, especialmente ella, leían apasionadamente. Luego, me atreví a crear un periódico llamado “El grito” en el Colegio Cardenal Pacelli, institución en la que finalicé mis estudios de bachillerato. Así, comenzó mi gran pasión por el periodismo y los medios de comunicación. Intenté estudiar ciencias políticas, pero creí que el tiempo no me alcanzaba para tanto. Sin embargo, continúo amando este tema tan polémico. Ahora en enter.co quiero investigar sobre las consecuencias políticas y sociales de la tecnología. También, desde pequeña, crecí con las palabras de mi abuela quien decía que había estudiado sociología para saber las razones de la pobreza y la desigualdad en Colombia. Por esto, bajo su influencia, decidí estudiar la misma carrera en la Universidad del Rosario. Aún en proceso de grado.

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