Netflix está apostando por diferentes estrategias para permanecer relevante ahora que la guerra del streaming ha debilitado su posición como el ‘rey del streaming’. La plataforma está apostando por incluir videojuegos, evitar que sus usuarios compartan contraseñas, apostar por un modelo con anuncios… pero algo de lo que se ha mantenido lejos es de la transmisión de deportes.
Lo que es extraño, considerando que plataformas como Star+ se sostienen en estas transmisiones, mientras que Amazon ha adquirido los derechos de nuevos eventos. El público de los deportes está allí y se pensaría que pagarían una suscripción si cuentan con la posibilidad de transmitir los encuentros de sus equipos favoritos.
Este 6 de diciembre Ted Sarandos, CO-CEO y CO fundador de Netflix, respondió a la pregunta (vía Indiewire) de porque Netflix no transmite deportes o está buscando estos acuerdos. Y su respuesta fue bastante sencilla y directa: no han encontrado la manera de hacer rentable el streaming de grandes deportes.
La explicación de Sarantos está en que la manera en la que se manejan estas licencias hace que estos productos están pensados para televisión, pero que sean demasiadas costosas para los servicios de streaming:
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“No somos anti deportes, estamos a favor de las ganancias”, dijo Sarandos. “Todavía tenemos que descubrir cómo hacerlo. Estoy muy seguro de que podemos crecer el doble sin los deportes, y más allá de eso, tal vez tengamos que averiguarlo, y en ese punto tal vez la economía cambie o tengamos la escala para resolverlo”.
Netflix siempre ha tenido esta relación extraña con la manera en la que se produce TV tradicional. Una buena razón es que una parte importante de los éxitos de la plataforma han crecido sin la necesidad de utilizar estrategias tradicionales. El Juego del Calamar, por ejemplo, se convirtió en una de sus más importantes y exitosas a pesar de que la plataforma no realizó ninguna campaña masiva. Por supuesto, esto se trató más de una casualidad y del impacto de las redes que de la manera en la que Netflix produce o publicita sus productos. Pero el resultado final es que Netflix no necesita de estas licencias para atraer a la audiencia o al menos competir con otros servicios.
Netflix, de manera interesante, tampoco ha ingresado al segmento de las producciones en vivo. Esto resulta interesante, considerando que uno de los productos por los que precisamente siempre ha apostado el servicio son producciones de comedia. Lo lógico sería que Netflix tuviera algún tipo de opción especial que permitiera a sus usuarios el poder ver estos eventos. Sarandos responde que en realidad Netflix ha contado con la tecnología por años. Pero que, de nuevo, no es de su interés en estos momentos perseguir este tipo de producciones.
“Técnicamente no hay nada novedoso en la televisión en vivo. Deberíamos poder hacer eso”, dijo Sarandos. “Entonces, esto se debe principalmente a la creatividad en lugar de tratar de abrir otros tipos de programación. Hace que la programación que estamos haciendo hoy sea un poco más divertida cuando es en vivo”.
Imágenes: Mohamed Hassan en Pixabay
