Por: Danna Katherine Perea Bedoya – @dnnpb (Instagram)
La tecnología es todo aquello que está creado para facilitar nuestra vida y solucionar algunas problemáticas de nuestro diario vivir. De hecho, los recursos tecnológicos se puedan convertir, incluso, en una propuesta artística.
Esto es lo que sucede con el videoarte, una técnica que tuvo sus inicios hacia el año 1965, en Estados Unidos y Europa. Allí, algunos artistas quisieron romper con los ideales impuestos hasta ese momento sobre cómo debía manejarse la tecnología para aproximarse a la imagen en movimiento, empezando por las transmisiones televisivas que se usaban para fines comerciales y en un ámbito mucho más aislado.
Precisamente, por estos días se realiza en Bogotá una muestra de videoarte llamada ‘Retrovisión Espectral – Aproximaciones a una historia del videoarte en Colombia’. Allí, tendrás la oportunidad de conocer y entender más sobre estos contenidos audiovisuales, viéndolos y percibiéndolos.
Esta exposición, organizada por el Instituto Distrital de las Artes (Idartes), se extenderá hasta el próximo lunes 25 de noviembre en el Monumento a Los Héroes (Avenida Caracas con calle 80).
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La gran protagonista del videoarte
La heroína en el salto al mundo del videoarte fue la cámara Sony DV-2400 Vídeo Rover, el primer equipo portátil, que se dio a conocer con el nombre PortaPack. Se trataba de una cámara de blanco y negro, acompañada de una unidad de grabación (una grabadora de casete abierto) que se transportaba en un bolso aparte.
Aunque una sola persona podía cargar esta última, su peso era considerable, así que los artistas de la época preferían ir a grabar sus piezas en parejas. Así, mientras una persona cargaba la cámara, la otra podía hacerse cargo de aquel bolso portable.
Esto dio inicio a una de tantas actividades artísticas. Nam June Paik fue un videoartista surcoreano y el primero en usar la PortaPack con este fin. Sus creaciones son una alusión a lo que vendría en este fragmento del arte.
Para que quede un poco más claro el concepto, la diferencia que tiene el videoarte con otras grabaciones es que su fin no es contar una historia con un inicio, un nudo y un desenlace, como lo haría un film cinematográfico, una novela, o una obra de teatro.
La construcción de su contenido, intuido por su creador, es mucho más abstracta. Esto hace que sus espectadores sean más sensibles en este espacio y lo perciban de una manera distinta y critica. Es allí donde viene al caso su papel en el arte, ya que se trasforma en una pieza original con un único contenido y, de la misma forma, un único significado.
Más detalles sobre la exposición en Bogotá
Si hasta el momento te has ‘encarretado’ con el mundo del videoarte, recuerda que en la exposición que se realiza en Los Héroes podrás encontrar piezas de artistas como Fredy Arias, Edgar Acevedo, Ana Claudia, Omaira Abadia, Clemencia Echeverry y muchos más.
Quedan pocos días para que te decidas a ir, pero si todavía tienes dudas, te recomendamos buscar en Internet la obra de otros exponentes de esta disciplina. Entre ellos se encuentran Bill Viola, Antoni Muntadas, Tony Oursler, Name June Paik y David Larcher. Estos expertos en videoarte prepararán tu viaje para visitar esta llamativa muestra, para la que deberás preparar más que tus cinco sentidos.
Si al final logras entender que el arte no es solamente pintar y dibujar, seguramente perderás el temor a utilizar los aparatos tecnológicos que tengas a la mano para crear obras de arte. En este momento de la historia, la tecnología nos permite realizar cosas mucho más allá de lo común.
Imágenes: Danna Perea
