Un día como hoy en 1955 nació uno de los mayores revolucionarios en la industria de la tecnología: Steve Jobs. Con la creación de la empresa Apple, el mundo conoció lo que sería una nueva tendencia tecnológica, gracias al iPhone, el iPad, el Mac, el iPod, todos estos productos que han conquistado al mundo con su diseño y funcionalidad en comparación con otras marcas.
Para Steve Jobs, Apple era una marca de culto que redefinió aspectos de la vida moderna como la relación de las personas con los computadores, los teléfonos y la forma de escuchar música, a partir de los dispositivos que la empresa diseñó y fabricó.
La multinacional comenzó en un garaje de Cupertino, California, lugar donde nació el primer computador Macintosh, herramienta cuyo objetivo era llevar la informática al alcance de la humanidad. Pero Jobs no estuvo solo en esta tarea, ya que contó con la ayuda de Steve Wozniak, quien lo apoyó siempre en sus revolucionarios diseños y caprichosos comportamientos.
Luego, Jobs buscó la manera de agregarle portabilidad a la música, por lo que presentó el iPod en 2001, gadget que junto a iTunes desempeña un papel fundamental en el paso del mercado de la música al mundo digital.
Más adelante lanzó el iPhone, un smartphone que convirtió los celulares en una herramienta indispensable para el público en general, y más adelante le dio paso al iPad con la cual revolucionó, una vez más, el mercado electrónico, permitiéndole a las personas llevar sus presentaciones y documentos en un dispositivo capaz de realizar tareas similares a las de un computador portátil.
Ninguno de sus productos fueron netamente inventos de Apple, ya que para aquel entonces los celulares, los reproductores de música (Walkman) y los computadore ya existían. Sin embargo, la compañía de Jobs aportó con una nueva estética en los productos, funciones avanzadas para el desarrollo de tareas y construyó una comunidad que se convirtió en un grupo de verdaderos seguidores de los productos desarrollados por la compañía de la manzana mordida.
En el desarrollo de los productos, Jobs siempre fue exigente con sus empleados, ya que no permitía que ninguna pieza fuese instalada si no cumplía con el 100% de los requisitos bajo las cuales fueron pensadas. Los espacios de organización del hardware, es decir, el lugar que ocuparían los diferentes componentes del dispositivo siempre fueron detallados por Jobs, al igual que los acabados y la funcionalidad que pudiese prestar cada pieza del producto al comprador. La funcionalidad, para Jobs, no estaba completa si no existía la elegancia en los productos.
Pero no todo fue un éxito, la compañía también experimentó fracasos con el lanzamiento de Lisa y Newton, un computador y agenda personal respectivamente con los que Apple no logró el impacto esperado en el mercado norteamericano. Además, en 1985 Steve Jobs fue expulsado de su misma empresa debido a una crisis interna, hecho que lo llevó a crear ‘Next’. Pero luego regresó a esta, para nada más y nada menos que salvarla de la quiebra.
Para Jobs, la funcionalidad no estaba completa si no existía elegancia en los productos
«Apple no muere, evoluciona», es la frase que los analistas del mercado digital han expresado tras los malos resultados en ventas de anteriores ediciones de los gadgets de la manzana, y este pensamiento invadió las mentes de los fieles seguidores de la marca tras la muerte de Jobs.
Seis años después de su fallecimiento, Steve Jobs puede compararse con las grandes estrellas de la industria musical que ya no están, porque sin necesidad de estar vivo, sigue presente en el diseño de cada uno de los productos que la manzana mordida presenta al mundo entero.
Imagen: Wikimedia Commons.
