Evaluación: ‘Bridgerton’

Antes de empezar a hablar de ‘Bridgerton’ y sus personajes, ubiquemos el tiempo. La historia se desarrolla en Londres de 1800, en la era victoriana en la época del año en que las mujeres eran presentadas en la Corte y empezaba el cortejo y la carrera por encontrar un esposo, pero la principal diferencia radica en que, a pesar de ser un retrato de la sociedad inglesa, Shonda Rhimes trae personajes de color como nobles y en altos cargos de la sociedad y su versión de ‘Chica Indiscreta’ (Gossip Girl) con Lady Whistledown y sus panfletos contando todo lo sucede en la voz de Julie Andrews.

Para leer más sobre ‘Bridgerton’, visita este enlace.

‘Bridgerton’ es una serie original de Netflix que en su tráiler prometía escándalos en una sociedad donde la mujer normalmente debe pagar el precio más alto. Más allá de esto, el show está cargado de clichés que harán que uno quiera seguir viéndolo hasta llegar al último capítulo, pero al final, cuando nos recuperamos del impacto nos encontramos con que en realidad estamos decepcionados. Hay mucho más que hacer con la historia y el final parece escrito bajo los parámetros de Disney, el viejo Disney, pero mostrando más piel en el intermedio.

Un cliché que nunca satisface completamente

BRIDGERTON

La serie está llena de clichés, desde la reina que aburrida de su vida quiere jugar con la vida de sus súbditos y definir su destino, hasta frases como: «ardo por ti». Un cliché y un buen gancho son la fórmula perfecta para que devoremos los capítulos uno tras otro. Y es que ¿quién no los ama?

Al final, podemos afirmar que, sí la serie tiene potencial, pero se queda corta y no entrega muchas de las tramas que podría desarrollar mejor a medida que las crea. Tampoco aprovecha de manera conveniente muchos de los personajes que introduce o estos desaparecen con un final que deja un sin sabor en la boca.

El principal problema es que ver la serie en maratón es fácil, entretenido y hasta convincente de que estas viendo una de las promesas de Netflix, pero cuando el rojo de los cachetes desaparece encuentras el vacío y seguramente, si prefieren una historia bien contada a los finales felices, se encontrarán pensando que hay mucho más que dar y que no quedamos completamente satisfechos.

El problema de la diversidad y de no hablar de lo importante

BRIDGERTON

En la serie explican como la alta sociedad aceptó a personas de color entre sus nobles. Básicamente, el Rey George III (el que estaba loco) se casó con la reina Charlotte (Golda Rosheuvel) quien era de raza mixta, lo que llevo a que en la corte aceptarán en posición de nobles a personas de color, incluyendo a la familia de Simón Basset.

Pero más allá de este comentario sobre cómo la sociedad los aceptó no hay reconocimiento a la lucha de la igualdad cultural y social. Lo que genera una burbuja perfecta en la que muchos se preguntarán si en realidad estamos viendo algún tipo de utopía. Este tipo de ceguera cultural y de falta de comentarios políticos frente a un tema que actualmente le compete muchísimo a la sociedad es muy raro en los programas de Shonda Rhimes (‘Scandal’, ‘How to Get Away With A Murder’).

Para las personas curiosas, la serie al final se puede convertir en una pequeña utopía de Grosvenor Square, que más allá de cambiar algunos detalles históricos y concentrarse en un retrato de la sociedad, falla en representar de manera adecuada muchas de las características que hacen de la época histórica uno de los mayores atrayentes de la trama.

De este modo, y con la falta del contexto de que está sucediendo fuera, muchos de sus personajes no logran evolucionar y solo los más importantes lo hacen.

El poder de dejar en la ignorancia a la mujer

BRIDGERTON

Si hay algo en que la serie marca un importante punto de vista es en el poder que tiene la ignorancia y cómo el sexo y el desconocimiento de este daba o quitaba poder en la época. Inicialmente, vemos a una ingenua Daphne Bridgerton que pronto encuentra que el placer y el conocimientos guardan poder.

La manera en que se representa el poder femenino es una constante en la serie desde el social, con la reina, la duquesa y la importante tarea de mantener la dignidad de una debutantes, hasta el poder de Lady Whistledown, que sin disfrutar de posición social logra llamar la atención de toda la corte y sus súbditos e incluso que estos quieran hacerse notar y finalmente, el hambre por conocimiento de Eloise, la hermana de Daphne, que no quiere debutar y en su lugar estudiar y ver el mundo y Daphne con el conocimiento sexual.

Ver las peleas que cada una tiene cone estos diferentes tipos de poder son de los principales remolinos que encontraremos en ‘Brdigerton’ y que permite que algunos personajes evolucionan más que otros. Al final, la mayoría de las historias y tramas se cierran, tal vez con un golpazo que dejará pensando al espectador más en el afán de darle un final feliz a la serie que el de terminar cada historia de manera apropiada.

Conclusiones

BRIDGERTON

Con todos los arcos cerrados, es muy probable que en una segunda temporada los personajes principales cambien para abrir nuevos. Lo que significa que, para los amantes de la relación de Daphne y Simón, podría ser una decepción.

La serie gracias a los clichés y buenos ganchos y giros dramáticos logra atrapar al espectador y tal vez más de uno la disfrute en una maratón de un fin de semana. Pero una vez despertamos del estupor, empezaremos a sentir el sin sabor de una historia que se queda corta en cumplir promesas y en desarrollar de manera adecuada la trama.

La mayoría de los aplausos se lo lleva la fotografía, escenografía y maquillaje y vestuario de la serie que logra trasportarnos a fiestas de jardín y bailes en medio de juegos pirotécnicos en épocas en los que darse la mano con otro vuelve a considerarse indecente.

Imágenes: Netflix. 

Diana Arias

Diana Arias

Soy comunicadora social de la Pontificia Universidad Javeriana, con énfasis en Producción multimedia y Periodismo, y Lingüista de la Universidad Nacional. Actualmente, estoy haciendo la especialización en economía de la Javeriana.

View all posts

Archivos