Si algo nos ha enseñado el cine de Hollywood es que por más control que intentemos ejercer sobre la inteligencia artificial, llegará un día en que esta se ponga en nuestra contra, como Skynet, en Terminator.
Hace unas semanas el buen Stephen Hawking dijo algo contundente respecto a este tema: «Las computadoras superarán a los seres humanos dentro de 100 años. Cuando eso pase, debemos asegurarnos de que los objetivos y metas de la inteligencia artificial estén alineados con los nuestros”.
Las investigaciones relacionadas a la inteligencia artificial, si no son manejadas con cautela y responsabilidad, podrían desencadenar una carrera armamentística que resulte fatídica para la humanidad, argumentan los pensadores e investigadores más importantes del mundo, por lo que le han pedido a la ONU que haga una ofensiva en contra de las armas autónomas.
En una carta abierta, publicada por el Future of Life Institute (FLI) y firmada por intelectuales de la talla de Stephen Hawking, Elon Musk, Steve Wozniak y Noam Chomsky, entre otros, advierten sobre los peligros de aquellas armas con inteligencia artificial que «automáticamente seleccionan y atacan objetivos sin intervención humana», y que fomentarían el terrorismo y las guerras.
La carta explica que las armas autónomas son consideradas la tercera revolución en la guerra, luego de la aplicación de la pólvora y de las armas nucleares. Sostienen que si bien este tipo de armas podría reducir el número de bajas humanas en el campo de guerra, los riesgos de instaurarlas son mucho más altos que el aparente ‘beneficio’.
«Creemos que la inteligencia artificial tiene un gran potencial para beneficiar a la humanidad en muchas maneras, y que el objetivo de este campo debe ser ese. Por el contrario, empezar una carrera armamentística con inteligencia artificial es una mala idea y debería ser prohibida (…)», concluye la carta.
Imagen: Terminator 2 (vía Facebook).
