Amazon está probando sus propios robots mensajeros en un barrio, en una área suburbana de Washington con sus clientes Prime. Por ahora, los carros o carretillas automatizadas, llamadas Amazon Scout, solo harán entregas en horarios de oficina, entre semana, rodarán por las calles a velocidad de un transeúnte y estarán acompañados de una persona que los supervisará por razones de seguridad.
Todo esto,se hace para asegurar que los robots pueden navegar por las calles sin lastimar a mascotas y peatones y sin poner en peligro a las personas que van manejando automóviles, aseguró el portal The Verge.
El Amazon Scout tiene seis ruedas, funciona con energía eléctrica y según el comunicado de la empresa, por ahora solo seis harán parte de la prueba.
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«Estamos muy emocionados por darle la bienvenida a Scout al creciente portafolio de servicios que le damos a nuestros clientes. Estamos atentos y queremos aprender del primer barrio con este servicio, así Amazon Scout, algún día, podría ser más sostenible y conveniente para nuestros clientes», aseguró Sean Scott, vocero del proyecto.
Una idea de Amazon con algunas fallas
Si bien es cierto que un robot puede trabajar 24 horas los 7 días de la semana con pocos inconvenientes hay ciertos factores que la empresa no ha tenido en cuenta, asegura el portal Wired.
Por ejemplo, el sistema aún no puede subir escaleras, una característica de muchas casas suburbanas; tampoco pueden abrir puertas y, en caso de necesitar un pin para hacer la entrega, no se sabe cómo el robot dejará el paquete si el usuario no está.
Además, el portal resalta que en distintas ciudades el tránsito de este tipo de vehículos está prohibido, así que considera que Amazon Scout no logrará pasar el periodo de prueba o que puede ser una buena solución para las áreas suburbanas, pero no para las grandes ciudades con alto flujo de peatones, scooter y bicicletas, entre otros.
Imagen: Amazon.
