Si de motores se trata, el futuro ya está claro: lograr algún día la meta de cero emisiones sin sacrificar el rendimiento. Los ingenieros y mecánicos trabajan intensamente avanzar hacia una industria que respete cada vez más el medio ambiente. Esto incluye la utilización de combustibles alternativos y el mejor aprovechamiento de los recursos naturales.
Pero la idea es que todos estos avances en motores y combustión necesitan de un equipo completo y mucha tecnología que les facilite la tarea y los haga más eficientes. Un ejemplo de esta tendencia lo da BMW, con sus automóviles eléctricos BMW i, a los cuales les dio un diseño especial en su carrocería y su interior.
Cuando ya se cree que todo está inventado, las carrocerías y la aerodinámica siguen siendo parte fundamental para que los motores sean eficientes, económicos y ecológicos, y parte del diseño se ha enfocado en adecuar los vehículos para el futuro cercano y lejano.
Pero ¿qué depara el futuro para el diseño de automóviles? Los diseñadores de todas las fábricas del mundo se han puesto a la tarea de crear novedosas ideas, por más alocadas que parezcan algunas de ellas.
La deportividad y la juventud son algunas de las premisas para el diseño de un amplio rango de automóviles, y así continuarán en el futuro, pues los autos ahora son un accesorio más de moda y se busca que su diseño vaya con la personalidad de los conductores y a la vanguardia con el crecimiento de las ciudades.
La idea es lograr diseños que perduren en la historia, como lo hicieron algunos modelos siguiendo las líneas que evoquen un estilo de vida y utilizando materiales diferentes que mejoren no solo la aerodinámica del vehículo, sino que sean innovadores, contribuyan con la seguridad y, por supuesto, cuiden el medio ambiente.
Aerodinámica sumada a autosuficiencia.
En materia de aerodinámica, el diseño de los autos del futuro se enfoca a lograr que estos sean no solo menos pesados, sino que el aire los estorbe menos para lograr mayor eficiencia del motor y autos que casi leviten sobre las calles, gracias a sus suaves líneas.
Por esto, la tendencia en diseño frente a este tema es hacer autos de líneas y perfiles cada vez más suaves, más redondeados, que permitan que el aire pase por encima y los lados sin chocar.
Además, la idea es que las carrocerías también sirvan para alimentar y aumentar la funcionalidad de los motores. Por eso la tendencia en autos solares, eléctricos o híbridos es lograr que incorporen tecnologías como celdas fotovoltaicas en los techos o entradas de aire en la parte lateral de la carrocería, que se puedan utilizar como fuente de alimentación eólica.
Los ‘huevitos, otra tendencia.
Entre los conceptos futuristas, que incorporan tecnologías y combustibles alternativos, una tendencia en diseño apunta hacia los carros ovalados, en forma casi de huevo, pues este formato busca un mejor desempeño de los motores y menor emisión de gases contaminantes.
Además, da mayor espacio a los pasajeros, que cada vez tienden a ser menos, para que puedan usar computadores portátiles o tablets sin problemas. La comodidad prima para el conductor, que tendrá un amplio espacio y a la vez con fácil acceso a la consola central del vehículo y total visión periférica sin puntos ciegos.
Desde espuma hasta plástico.
La utilización de materiales novedosos que permitan sacarle provecho a la carrocería e incluso los hagan aún más seguros contra accidentes es otra tendencia en el diseño de los vehículos.
Hay carroceros dedicados a crear conceptos que sirvan para probar sus teorías sobre lo que deberían incorporar los autos del futuro. Un ejemplo es el visionario suizo Frank Rinderknecht que todos los años lanza un nuevo concepto, cada uno con un diseño más alocado aunque con una razón de ser, como el eXasis, que realizó para celebrar su aniversario número 30, junto con el apoyo de los especialistas de Bayer MaterialScience.
El auto, además de tener un diseño retro moderno –otra tendencia actual–, tiene la particularidad de que su carrocería está hecha en un plástico transparente, gracias a unas planchas de policarbonato que los químicos de Bayer le ayudaron a fabricar. Esto le permite ser muy liviano y ser muy eficiente en el consumo de energía.
Y como la seguridad va de la mano del diseño de la carrocería, pues los autos cada vez necesitan pasar por pruebas más duras en materia de protección, también se han presentado al mundo diseños que incluyen materiales blandos para la carrocería. Esto les permitiría ser más seguros tanto para sus ocupantes como para los peatones, que en caso de accidente no van a golpearse con duros materiales, sin que esto signifique que dejen de proteger el motor.
Incluso se han desarrollado automóviles con carrocerías hechas con recursos naturales que evocan un futuro más ecológico y amable con el medio ambiente, como el auto de madera que puede flotar en el agua.
Espacio de sobra.
La comodidad de los pasajeros es una prioridad entre los encargados de diseñar automóviles. Por esto, los interiores son intensamente estudiados y evaluados antes de salir al mercado con un nuevo modelo.
Pero en cuanto a diseño exterior, la tendencia es crear automóviles que a la vista no parezcan grandes lanchas ni más robustos de lo acostumbrado –incluso los tamaños en capó ya han bajado–, a diferencia de otros tiempos en los que era usual encontrar enormes frentes donde se albergaban los grandes motores V8 y turbo.
Ahora, y para el futuro, todo indica que los compactos estarán entre los autos más codiciados, pues el espacio entre las calles de las grandes ciudades ya resulta escaso, son más prácticos de parquear en lugares pequeños y hacen más eficiente toda su tecnología. Eso sí, sin restarles espacio a los pasajeros, y con baúles amplios en los que quepa todo lo necesario para los conductores y sus pasajeros.