En 2016 Nintendo no estaba en su mejor momento. Después del fracaso de la Nintendo Wii U la compañía se enfrentaba a los desafíos de una nueva generación de videojuegos que enfatizaban la calidad gráfica y apostaban al 4K. Sin embargo, la compañía decidió apostar a algo diferente. A mediados del 2016 reveló la Nintendo Switch, un híbrido entre consolas de sobremesa y portátiles.
Y aunque el concepto parecía atractivo en el papel, faltaba ver su ejecución. La mayor preocupación para muchos era si el modo portátil supondría una ventaja real frente a otras consolas o si era solo una novedad sin futuro. Próximos a finalizar el 2017 decidimos en ENTER.CO realizar un balance del primer año de vida de la Nintendo Switch. Al final entregaremos nuestro veredicto. ¿Es una consola que vivirá por muchos años o pasará al olvido fácilmente?
Lo de adentro es lo que cuenta
Empecemos por lo obvio. La mayor razón por la que la Switch es deseada está en su catálogo de juegos. Si algo se puede decir de Nintendo en 2017 es que consiguió varios home runs con sus exclusivos y son estos títulos los que garantizarán que más Nintendo Switch se vendan en diciembre. Fue por completo acertado que la compañía lanzará su consola con ‘The Legend of Zelda: Breath of the Wild’. Este juego demostró el potencial de la consola con un fantástico gameplay que se traducía bien en su versión portátil y de sobremesa.
A esto se sumó luego el éxito de ‘Super Mario Odyssey’, que muchos calificaron como uno de los mejores juegos de la franquicia. Pero no solo esto, sino que Nintendo también buscó ampliar su catálogo con juegos de otros desarrolladores: ‘Doom’, ‘Skyrim’, ‘Shovel Knight’, ‘The Binding of Isaac’, ‘Mario + Rabbids: Kingdom Battle’, etc. Sin duda, en los juegos que ofrece está la mayor ventaja de la Switch frente a sus competidores.
Portabilidad: un arma de doble filo
El diferencial de la Switch frente a las demás consolas en el mercado está en su portabilidad. El problema está en cómo los juegos que ofrece pueden aprovechar al máximo estas capacidades. Pensemos en los juegos desarrollados por Nintendo para la Switch. Todos ellos están creados para que funcionen y se sientan bien en una consola portátil o una pantalla de televisor. Para esto la compañía no se ha obsesionado con los detalles gráficos, sino que se ha enfocado en gameplay. Por ejemplo, el diseño de títulos que aprovechen, por encima de todo, la tercera persona (que es la que mejor funciona en los juegos portátiles).
El problema llega cuando se traen juegos de otros desarrolladores a la Switch. Y la razón es que estos títulos no fueron pensados para una portátil, por lo que se siente algo de ‘incomodidad’ al jugarlos. Más importante, son versiones más simples de los juegos para PS4 o Xbox One.
El mayor problema a futuro que la Nintendo Switch enfrenta es el llegar a un ‘acuerdo’ con los desarrolladores. Si bien su portabilidad es una ventaja para muchos juegos, resulta importante aclarar que es un beneficio que solo ve reflejado en ciertos títulos. Es también un elemento que pondrá limitaciones a desarrolladores que quieran portar sus videojuegos. Esta es una espada de doble filo de Nintendo.
Nintendo Switch: hardware sin mucho brillo
Mientras que otros desarrolladores han explorado la posibilidad de máquinas más potentes, la Nintendo Switch prefirió un perfil más bajo. Con 32 GB de memoria interna (una porción dedicada al sistema) es imposible tener más de un copia virtual de un juego instalada al mismo tiempo (a menos que compres una memoria externa). También son contados los problemas reportados con su GPU, por lo podemos afirmar que el procesador NVIDIA Custom Tegra cumple con lo necesario para sesiones de juego sin interrupciones.
En efecto, es la consola portátil más potente de la historia. Por desgracia, cuando lo evaluamos como una máquina de sobremesa, tenemos algunos problemas. Por ejemplo, solo puede conectarse vía inalámbrica a Internet. En Colombia estas conexiones no tienen ni la calidad o potencia necesaria, por lo que resultan insuficientes para aquellos que juegan online (puedes comprar un adaptador de LAN, pero este se vende por separado). Su control para la versión de sobremesa es en extremo incómodo y está lejos de ser óptimo para largas sesiones de juego.
¿Solo de Gameplay puede vivir la Nintendo Switch?
Según el último reporte de la compañía, para septiembre de 2017 se habían vendido 7.63 millones de Nintendo Switch en el mundo. Estos números son mucho más de que se esperaba de la consola. Y su primer ciclo de vida ha demostrado una solidez que ha permitido un ‘segundo aire’ para la compañía japonesa.
De manera curiosa, la revolución que propuso la Switch no fue la fusión entre consolas portátiles y de sobremesa. Si algo ha demostrado es que los gráficos y potencia no lo son todo en el mundo gamer. De hecho, su éxito bien puede ser una bofetada para Xbox y PS4 que le han apostado de manera agresiva a alcanzar una ‘verdadera experiencia 4K’. La lección a aprender es que quizás el futuro de los videojuegos no está en tirar millones de dólares a las gráficas, sino en desarrollar gameplay que enamore al gamer moderno.
Sin embargo, con ‘Mario’ y ‘The Legend of Zelda’ fuera de la lista de pendientes la pregunta es cómo Nintendo buscará seguir atrayendo a más usuarios a su consola. ¿Puede la Nintendo Switch sobrevivir a punta de gameplay? Esperamos que sí.
Imágenes: Nintendo
Definitivamente pienso que el éxito para nintendo esta en el hecho de poder jugar online cooperativo los juegos legacy de Nintendo; recurriendo a títulos mas que conocidos como Gradius, Contra. Y super clasicos como Super Mario Bros 3, asi como juegos de estrategia que no requieren tanto potencial como la franquicia de Chessmaster de Ubisoft, tetris y Block Out, así como versiones anteriores de titulos como Gran turismo 5 y 6. También debería incorporar a su cartelera juegos cuyo exito ya esta bien comprobado como Donkey Kong Country así como una versión exclusiva del conocido Super Mario Maker y no caería mal una version exclusiva del ya muy renombrado Sonic el erizo veloz.