Evaluación: ‘Crash Bandicoot’: It’s About Time’

Crash Bandicoot’: It’s About Time
'Crash Bandicoot’: It’s About Time' es la secuela verdadera de la franquicia que merecíamos y el punto de entrada ideal para los nuevos fans de Crash.

Crash fue uno de mis primeros juegos, con la PS1 que conseguimos de segunda mano. Recuerdo pasar noches enteras junto con mi hermano, turnándonos el control con cada nivel, escapando a toda velocidad del triceratops que nos quería aplastar, derrumbando aviones con precisión, recorriendo la muralla china en los lomos de un tigre o buceando (y aprendiendo nuestras primeras groserías) en los niveles subacuáticos. No, nunca fui uno de los genios que eran capaces de superar cualquier nivel con 0 muertes. Pero eso no le quita peso a la afirmación de que ‘Crash’ está tatuado en mis pulgares de videojugadores.

Más de una década después y cuando mi hermano ya no me puede acompañar en estas trasnochadas de Crash, les puedo decir con franqueza que ‘Crash Bandicoot’: It’s About Time’ ha traído a estos pulgares con complejo de anciano buenas memorias. El mayor elogio que se le puede dar a la entrada más reciente de la franquicia es que, sin lugar a dudas, se siente como parte de la saga de ‘Crash’.

Pero lo mejor de ‘Crash Bandicoot’: It’s About Time’ es que también es una versión moderna del mismo juego que me obligó a pasar de largo hace años. Toys for Bob (el estudio detrás de la entrada) integra nuevos elementos y piezas en el rompecabezas que este platformer que lo hacen más accesible, pero al mismo tiempo más desafiante. Crash mantiene los elementos más definitivos de su experiencia, pero de manera simultánea no teme cambiar las reglas del juego. Esta es la cuarta parte que la franquicia se merecía y, con algo de suerte, la prueba de que todavía es posible tener a este Bandicoot sacando maldiciones y callos por un tiempo más.

Lo nuevo y lo viejo

Crash Bandicoot’: It’s About Time

Quizás una de las muestras más claras que tiene ‘Crash Bandicoot’: It’s About Time’ de su espíritu conciliador entre la tradición y lo novedoso está en sus modos de juego. La nueva entrada cuenta con dos modalidades: la clásica te permite jugar como los títulos de antaño, en la medida de que cuentas con una cantidad limitada de vidas y si mueres tienes que empezar el último nivel desde el inicio. Pero la nueva modalidad te permite tener vidas infinitas, de manera que lo se cuenta es el número de veces que has muerto. De hecho, si el juego determina que hay un lugar en particular que te está dando problemas, creará un checkpoint adicional por ti.

La primera reacción que es de esperar para algunos es: Crash se ha vuelto para casuales. Mi respuesta es: se trata de un modo opcional. Uno, que además permite que los jugadores que por primera vez quieran probar sus habilidades con ‘Crash’ no se sientan intimidados. El nuevo modo permite algo que los juegos tradicionales no y es la oportunidad de probar y aprender, sin el temor de tener que iniciar de 0 o las largas sesiones de grinding en los primeros niveles para acumular vidas.

Pero además es perfecto para el nuevo juego, porque incentiva todavía más la exploración y perfección. Si tu meta no es sobrevivir con un número de vidas, puedes probar un salto y corregir tú tiempo una y otra vez sin sentir la presión de un contador marcando las muertes antes del ‘game over’. Algo que es más que necesario, pues ‘Crash Bandicoot’: It’s About Time’ no es, bajo ningún concepto, una versión más ‘fácil’ de la franquicia.

Por ese Skin perdería 1000 vidas

¿Si no hay un límite de muertes, cuál es la motivación para jugar de manera perfecta? ‘Crash Bandicoot’: It’s About Time’ modifica su sistema de recompensas. Ahora, en vez de recibir diferentes gemas por destrozar todas las cajas o encontrar un nivel secreto, tienes una serie de retos a cumplir: morir menos de tres veces, destruir todas las cajas, destrozar todos los parlantes, completar el nivel en reversa… etc. Estos desafíos no tienen que ser completados en una sola visita, pero son necesarios para poder desbloquear skins únicos de los personajes ¿Quieres vestir a Coco como una Ninja o Crash como un pirata? Tendrás que dominar a la perfección cada mapa para poder obtener estos logros.

Luego están las máscaras cuánticas, que se presentan como powerups nuevos en este juego. A diferencia de las máscaras tradicionales, el objetivo en esta ocasión no es protegerte, sino entregar habilidades necesarias para que completes cada nivel: objetos que se desvanecen, saltos prolongados o la capacidad de intercambiar la gravedad. Antes de jugar es fácil pensar que estos agregados simplifican la experiencia de ‘Crash’, pero en lo personal creo que añaden un nivel de dificultad adicional.

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Con todo lo complicado que era el Crash Original, muchos de sus niveles se resumían a memoria muscular y timing. El único poder de nuestro personaje era saltar, así que no había espacio para mucho más. Pero los nuevos power ups exigen la maestría de cada uno de ellos para poder completar cada nivel tantas veces. Ya no se trata solo de memorizar o ajustar cada salto, sino de mantener frescas las nuevas habilidades y amaestrarlas de manera que se conviertan en algo tan natural como los giros o saltos de Crash.

Por cierto, más que bien recibida la nueva mejora que permite ver dónde aterrizará Crash antes de completar un salto. Muchas de mis frustraciones con el juego anterior tenían que ver con saltos que tenían el timing correcto, pero no el ángulo. La nueva mejora elimina esas fallas de saltos que parecían llegar al borde, pero que nunca lo hacían.

‘Crash Bandicoot’: It’s About Time’: más que un Bandicoot

Crash Bandicoot’: It’s About Time

Hay una sensación permanente en ‘Crash Bandicoot’: It’s About Time’ de que sus desarrolladores querían que el jugador pasara el mayor tiempo con el título, sintiendo pocas veces el tedio de hacer lo mismo. La nueva entrada, por ejemplo, cuenta con nuevos personajes jugables que tienen sus historias alternas. Se tratan de niveles bono que te permiten atravesarlos a través de los ojos de Twana, Dingodile y el Dr. Neo Cortex. Y  Toys for Bob puso un esfuerzo en que estos personajes se sintieran únicos y le dieran variedad al juego. No hay nada como atravesar un nivel con la agilidad de Tomb Raider de Twana o convertir enemigos en plataformas con Cortex.

Luego están los retos ya antes mencionados de completar un nivel en el modo reverso, completar los niveles de bono o incluso su modo de VS que permite jugar contra hasta 4 personas, luchando por ver quién es la persona que completa primero un nivel o rompe más cajas. Es una adición interesante que, si bien no es lo más impresionante del título, servirá para que muchos puedan disfrutar de esa experiencia de ‘multijugador’ de Crash, que antes se limitaba a pasar el control entre diferentes manos.

Si hay que encontrar una falla aparente está en las batallas con los jefes. Las anteriores entradas de Crash tenían problemas para conciliar la dificultad de sus niveles con la de los enemigos que se encontraban al final. En esta entrada no hay algún encuentro final que resulte necesariamente anticlimático, pero sin duda se sienten mucho menos interesantes que cada uno de los retos entre plataformas, saltos y carreas contra la muerte.

Imágenes: capturas de pantalla y Activision

Jeffrey Ramos González

Jeffrey Ramos González

Mi papá quería que fuera abogado o futbolista. Pero en vez de estudiar o salir a la cancha, me quedé en la casa viendo 'Dragon Ball Z', jugando 'Crash Bandicoot' y leyendo 'Harry Potter'. Así que ahora que toca ganarse la 'papita' me dedico a escribir de lo que sé y me gusta. Soy periodista graduado de la Javeriana, escritor de ficción. He publicado en El Tiempo, Mallpocket, entre otras revistas.

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