Para los ingenieros de Apple no debe ser fácil crear cada año una nueva generación de teléfonos innovadores, poderosos y resistentes, y luego tener que crear al año siguiente una generación mejorada, diseñada para que el usuario deje atrás su amado equipo actual y lo cambie por el nuevo. Me hace pensar en una versión moderna del castigo de Sísifo, un rey que según la mitología griega fue condenado por los dioses a subir todos los días una enorme piedra por una ladera empinada, la cual se caía antes de llegar a la cima y obligaba a Sísifo a empezar de nuevo su extenuante labor.
Y si esa tarea de los ingenieros ya representa un gran reto, más empinada debe ser la ladera cuando se trata del smartphone de más alta gama de Apple, aquel obligado a rozar la perfección, y que este año es el iPhone 11 Pro Max, el sucesor del iPhone Xs Max del 2018.
El iPhone 11 Pro Max, que hemos venido probando en ENTER durante dos meses, es un equipo poderoso, resistente, con un diseño atractivo, muy fácil de usar, con grandes capacidades para fotografía y video, y con la perfecta y fluida integración que brinda el hecho de que Apple fabrica no solo el software, sino el procesador y otros componentes de hardware de sus equipos.
El único pero es que este teléfono no solo aumenta cada año sus atractivas prestaciones, sino su precio. Y por cuenta de la fuerte devaluación del peso frente al dólar, ahora se trata de un smartphone que cuesta entre 5,5 millones y 7,2 millones de pesos, según su capacidad de almacenamiento, que va de 64 a 512 gigabytes (GB).
Ahora bien, lo que para el grupo de Sísifos de Apple pudo haber sido muy arduo, para los usuarios es un deleite, porque andar en el día a día a bordo de este avanzado smartphone es una cuesta abajo de alto rendimiento, funciones seductoras de hardware y software, usabilidad, mayor durabilidad y características avanzadas de fotografía y video que engancharán hasta al usuario más exigente.
Antes de ver cuáles son las novedades de este equipo, vale la pena recordar que el iPhone 11 está disponible en Colombia desde el 18 de octubre del 2019, y se ofrece en tres modelos. El equipo de nivel de entrada es el iPhone 11, el sucesor del iPhone XR, que tiene una pantalla LCD de 6,1 pulgadas y viene con doble cámara trasera. Además, hay dos modelos de gama alta que tienen triple cámara trasera y que Apple diferencia con la denominación ‘Pro’: el iPhone 11 Pro (con pantalla OLED de 5,8 pulgadas) y el iPhone 11 Pro Max (OLED de 6,5 pulgadas).
Este último es el teléfono más avanzado de Apple, y es el foco de este artículo. A continuación le contamos cuáles son sus principales cualidades.
La triple cámara trasera del iPhone 11 Pro Max
La principal novedad en los iPhone 11 Pro, frente a los teléfonos equivalentes de la generación anterior, es su triple cámara trasera. Con esta característica, Apple recorta la brecha que sus teléfonos tenían frente a la gran cantidad de celulares del mundo Android que vienen con tres, cuatro y hasta cinco cámaras traseras.
El iPhone 11 Pro tiene en la parte trasera un módulo cuadrado que aloja tres lentes de 12 megapíxeles (además del flash y un micrófono). Uno de los lentes es el ancho tradicional (con una apertura de ƒ/1.8, que capta bastante luz); además, hay un nuevo lente ultra ancho, con 120 grados de campo de visión (ƒ/2.4), y un teleobjetivo para los acercamientos (ƒ/2.0) con zoom óptico 2X. Cada uno de esos lentes puede grabar video 4K, con rango dinámico extendido y estabilización de video mejorada.
Gracias a esos lentes, el usuario tiene tres opciones para tomar cada foto, según el nivel de acercamiento que quiera tener en la escena. Y cambiar entre un lente y otro es muy fácil, ya que la aplicación de fotografía del iPhone 11 Pro muestra unos círculos que se pueden tocar para seleccionar el nivel de acercamiento deseado.
El lente ultra ancho, la novedad en el iPhone 11, ofrece un ángulo de visión muy amplio, lo que lo hace ideal para tomar fotos de paisajes, para capturar grupos grandes de gente o para captar todo un ambiente interior. La distancia focal de ese lente es equivalente a 13 mm (es una especie de ‘ojo de pescado’), mientras que el lente ancho normal tiene una distancia focal de 26 mm.
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Una nueva función presente en los tres iPhone 11, el modo noche, permite tomar fotos en condiciones de muy baja iluminación. Cuando una captura lo requiere debido a que la luz es muy baja, este modo se activa automáticamente y, al oprimir el botón de captura, la cámara comienza a tomar varias fotos durante un período de tres segundos. Uno simplemente debe mantener el teléfono lo más quieto posible. Luego, el software de la cámara alinea las fotos para corregir el movimiento, descarta las secciones que están demasiado borrosas, y fusiona las imágenes más nítidas en una sola foto.
De otro lado, el iPhone 11 Pro puede grabar video 4K con cualquiera de sus cuatro cámaras (las tres traseras y la frontal) hasta a 60 cuadros por segundo y en alto rango dinámico o HDR (esta es una tecnología que permite ofrecer colores muy vivos y cálidos, imágenes más detalladas y parecidas a las del mundo real, y mejores niveles de contraste). Además, cambiar entre un lente y otro al grabar video es tan sencillo como cuando se está tomando una foto. Uno puede realizar los acercamientos de forma gradual, pero también puede saltar de un lente a otro con solo tocar un botón en la pantalla.
Algunos desarrolladores de apps están aprovechando los lentes del iPhone 11 para ofrecer funciones atractivas, como la opción de multicámara que brinda la app Filmic, una de las más populares para iOS. Gracias a esta nueva característica, el usuario puede saltar fácilmente entre un lente y otro (incluyendo el de la cámara frontal para mostrar lo que está ocurriendo detrás de la escena), y además tiene la opción de escoger dos de esos lentes para realizar una grabación simultánea e independiente en cada uno de ellos (al final se generan dos archivos de video separados, uno por cada lente).
Hay que mencionar que la gracia del iPhone 11 Pro no está solo en la calidad de los videos que captura, sino en lo fácil que es editarlos directamente en el teléfono. La aplicación de video del nuevo sistema iOS 13 hace que sea muy sencillo cambiar el contraste o el brillo, aplicar filtros, recortar un video, etc.; todas estas tareas ahora se realizan en los videos con la misma facilidad con la que uno suele editar las fotos.
Los videos que uno graba en el iPhone 11 Pro Max son fluidos y con un gran nivel de detalle gracias no solo a las cualidades de los lentes, sino también al poder del A13 Bionic, el nuevo chip que ahora actúa como ‘cerebro’ de los iPhone 11.
Pero antes de pasar a ese procesador, vale la pena mencionar otra característica nueva en la parte de fotografía que es muy útil: se trata de QuickTake, que permite cambiar rápidamente a video simplemente oprimiendo y manteniendo el botón del obturador cuando se está tomando una foto.
iPhone 11 Pro Max: a toda máquina
Buena parte de la magia del iPhone 11 Pro Max en la parte de fotografía y video tiene que ver con el mayor desempeño del procesador A13 Bionic. Este nuevo chip, de seis núcleos, ofrece hasta 20 por ciento mayor rendimiento que el A12 de la generación anterior, y consume entre 30 y 40 por ciento menos energía.
Es gracias a este chip que el iPhone 11 Pro puede manejar la enorme carga de trabajo y de procesamiento de datos que tienen tareas como la grabación de video 4K a 60 cuadros por segundo y en alto rango dinámico (HDR). Pero, más allá de las cifras de desempeño, es importante resaltar que este chip explota cada vez más tecnologías como la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje de máquina para realizar muchas de sus funciones.
Por ejemplo, la inteligencia artificial le permite al iPhone 11 reconocer los rostros en una foto para mejorar su iluminación y los detalles en la función de Smart HDR que ofrece este teléfono. La IA también está involucrada en los ajustes que realiza el modo noche para mejorar por software la iluminación de las imágenes. Y cuando se graba video 4K, esa tecnología ayuda a optimizar diferentes partes de una escena, a reducir el ruido en la imagen y a ajustar los colores.
La parte del procesador que se encarga de esas funciones es el neural engine, un chip de ocho núcleos que maneja funciones del teléfono como el sistema de triple cámara, el reconocimiento de rostro (Face ID) y las aplicaciones de realidad aumentada. El neural engine ahora es 20 por ciento más rápido y consume 15 por ciento menos energía que en los chips de la anterior generación.
Más luminosidad, más resistencia, más batería
Las mejoras que ofrece el iPhone 11 Pro en fotografía y video tienen el complemento ideal en su pantalla OLED de 6,5 pulgadas, la más luminosa y nítida creada para un iPhone. Esta pantalla ahora tiene una tasa de contraste excepcional (2 millones a 1) y la mayor luminosidad alcanzada en un iPhone (1.200 nits), lo cual permite que uno lea textos o vea todos los elementos con claridad incluso cuando se usa el teléfono en exteriores en un día soleado.
Apple también aumentó en este teléfono la resistencia al agua y al polvo. Los dos modelos Pro aguantan un chapuzón en el agua de hasta 30 minutos a cuatro metros de profundidad (el iPhone Xs Max del 2018 aguantaba el mismo tiempo, pero a dos metros de profundidad).
El iPhone 11 Pro Max también ofrece una mayor duración de batería; según Apple, aguanta cinco horas más que el iPhone Xs Max antes de necesitar una recarga. En nuestro caso, la batería siempre aguantó todo un día completo cuando usamos el teléfono de forma muy intensa (la mayoría de las veces la batería duró dos días con nuestro nivel de uso habitual, que es moderado).
Este teléfono tiene una ventaja adicional. Aunque los tres modelos de iPhone 11 permiten carga rápida, los dos modelos Pro incluyen sin costo adicional el cargador de 18W (vatios) que se requiere para aprovechar esa característica (en el caso del iPhone 11 se debe comprar por separado).
La carga rápida saca de cualquier apuro al usuario, ya que en pocos minutos lleva el teléfono a un nivel de batería aceptable. En nuestras pruebas, por ejemplo, en solo 15 minutos ese cargador de 18W nos brindó 23% de carga adicional (con un cargador normal, en 15 minutos solo subió 7%); y en 45 minutos nos brindó 66% de carga (con el normal, en 45 minutos solo cargó 21%).
La diferencia en tiempo es realmente notable: con el cargador de 18W del iPhone 11 Pro Max el teléfono tardó 1 hora y 50 minutos en pasar de 5% a 100% de carga. Con un cargador de iPhone 11 convencional, al Pro Max le tomó 3 horas y 52 minutos pasar de 5% a 100% (dos horas más).
Ficha técnica del iPhone 11 Pro Max
– Pantalla: OLED de 6,5 pulgadas, con 2.688 por 1.242 píxeles de resolución y una densidad de 458 puntos por pulgada. Contraste de dos millones a 1.
– Procesador: A13 Bionic.
– Capacidad de almacenamiento: 64, 256 o 512 GB.
– Cámara trasera triple: un lente ancho (con apertura de ƒ/1.8), uno ultra ancho (de ƒ/2.4 y campo de visión de 120 grados) y un teleobjetivo (ƒ/2.0), todos de 12 megapíxeles. El zoom óptico es 2X.
– Cámara frontal: de 12 megapíxeles y apertura de ƒ/2.2.
– Grabación de video: 4K de hasta 60 cuadros por segundo en todas las cámaras (incluyendo la frontal).
– Otros: reconocimiento de rostros, resistencia al agua.
– Precio: 5,5 millones de pesos para el modelo de 64 GB. El modelo de 256 GB cuesta 6’279.000 pesos y el de 512 GB vale 7,2 millones de pesos.
Imágenes: Apple
