Imaginen esta escena: están como espectadores en un torneo de ‘Gears of War’. La partida que están viendo es entre un equipo de los Estados Unidos y uno mexicano, que se juega el orgullo local. La ronda finaliza y uno de los miembros de equipo americano se levanta y (en inglés) a todo grito dice:
-¡Miralo, mira a esta bebé! ¡Está temblando! ¡Parece que va a llorar! ¿Cómo es que se dice en español? ¡Basura! Si eso eres ¡Basura! ¡Estos tipos son unos completos idiotas! ¡Idiotas!
A sus insultos le hacen eco los de sus compañeros de equipo, que en su idioma intentan hacer entender a los mexicanos lo terrible que juegan. Luego, en el siguiente match, cuándo el equipo local se lleva la victoria, un chico se levanta con una camiseta del equipo y repite el ritual:
-¡Mira a tu papá, pinche pendejo! ¿Ni siquiera sabes cómo usar una rocket launcher? ¡Aprende a jugar, puto!
A esto se le llamada trash talk (charla basura). Es un intercambio que se repite cada partida. El ganador se levanta e intimida a los otros con potentes gritos. Mientras, los perdedores deben quedarse callados en silencio y soportar los insultos. Esta es una arena en donde el derrotado no tiene derecho a defenderse. Lo podrá hacer, pero solo si consigue ganarle a las personas en el otro extremo de la mesa.
En cierta manera se siente como los espectáculos de lucha libre. Un campeón levantando su cinturón y provocando al retador. Son triviales momentos que le añaden algo de drama y tensión al juego. Y este efecto solo se duplica cuando hay una partida muy cerrada.
Una clásica estrategia de guerra
Aunque estos gritos e insultos pueden parecer producto de la euforia, hay más que eso. Se trata de una estrategia que los jugadores usan a su favor. El propósito de la trash talk es simple: desestabilizar al oponente. Supongamos que acabas de sufrir una derrota. Lo correcto es mantener la cabeza fría y evitar cometer errores por culpa de la frustración. Pero mantener la compostura es complicado cuando tienes a alguien gritando lo terrible que eres.
Como resultado, se generan malas jugadas. Cuándo el trash talk tiene efecto se puede ver una peor coordinación en el equipo. Para los jugadores más novatos es un elemento que empeora los nervios frente a un rival que los está superando. Lo más importante: rompe la concentración. Todo jugador profesional sabe que después de una derrota lo más importante es concentrarse en el siguiente partido.
«Ha sido un elemento presente en ‘Gears of War’, desde que puedo recordar. Amo este aspecto del juego. Creo que cuando los jugadores se pueden levantar y plantarse en la cara del otro equipo se desata toda una guerra mental. Y me encanta que los desarrolladores hayan abrazado este concepto. Mientras que no sea personal, deja que se desate. Porque al final del día tu habilidad al jugar es lo que importa. Si soy honesto, nos ayuda que el otro equipo use trash talk con nosotros. Cuándo lo hacen, enojan a mi equipo y ellos juegan mejor así. Si algo, nos ayuda que se levanten y crean que son mejores que nosotros», afirma Nick ‘Ashes’ Ridgeway, coach de OpTic Gaming.
Pero hay una razón más sencilla que no es tan racional. Es a través de estos gritos que los jugadores pueden canalizar esa euforia producto de la victoria y enfriar sus cabezas antes de buscar de nuevo la derrota de los oponentes.
Las reglas del insulto en ‘Gears of War’
Esto no significa que todo se valga en la competencia. Hay una serie de reglas que acompañan el insulto. Por ejemplo, ninguno de los equipos realiza la trash talk en medio de la partida. La principal razón es un elemento de estrategia. Aunque provocar al rival tiene sus ventajas, el tiempo invertido se usa mejor al observar la partida y apoyar a los compañeros de equipo. Tampoco conviene romper el ritmo propio en un juego donde cada segundo de acción importa.
«Yo lo amo. Siento que el trash talk y ‘Gears of War’ son como el ‘jamón y queso’, disculpandome si es una mala analogía. Es divertido de mirar. Le permite a los fans emocionarse. Le ayuda a los jugadores a darse animo y confianza. Creo que separa a ‘Gears of War’ de cualquier otro eSport afuera. Y los jugadores entienden que es una parte del juego. Después de las partidas los ves hablando. Muy raro se convierte en algo personal», afirmó Dana Sissons, director de comunicaciones para The Coalition.
Desde logística también hay ciertos parámetros que se deben respetar. Están prohibidos los insultos homofóbicos y racistas. Y, de alguna manera, los jugadores logran apegarse a estas reglas para insultar al rival. Eso no evita que los problemas no existan. Algunos jugadores se lo pueden tomar personal e intentan continuar la riña cuándo los escopetazos han parado en ‘Gears of War’.
Imágenes: ENTER.CO
