Mientras que muchos en Colombia siguen rabiando a más no poder por la escasa variedad de la televisión nacional, en otros países comienzan a disfrutar de la televisión digital interactiva (iDTV), que posibilita, con una conexión a Internet de alta velocidad, el acceso a amplios contenidos en línea.
El servicio permite recibir los canales tradicionales de televisión, así como películas y música por demanda. Además, se escoge y configura la programación al gusto del usuario.
A través de esta conexión, que se vale de un estándar para el acceso a la Red, el Protocolo de Internet (IP), se pueden recibir señales de televisión por suscripción, teléfono e Internet en el hogar.
En Bélgica, por ejemplo, la empresa Belgacom habilitó a finales de julio su servicio de iDTV, luego de una etapa de prueba con mil familias desde noviembre del 2004.
El paquete inicial incluye 55 canales de video, y la cantidad aumentará en el futuro. Además, los usuarios tienen la posibilidad de acceder a un catálogo de películas a un costo de entre dos y seis euros cada una (entre 6.000 y 17.000 pesos, aproximadamente).
Para obtener estos beneficios es necesario que los operadores habiliten sus redes y que de esta manera todos los contenidos puedan viajar a través del mismo medio.
Sin embargo, en nuestro país el asunto se ve un poco más demorado. Si bien las compañías están haciendo inversiones para fortalecer sus redes, falta un cambio sustancial para llegar a ofrecer servicios de este tipo.
A ello se suma la falta de políticas claras por parte del Gobierno para establecer lineamientos que permitan la implantación del ¿triple-play¿ o ¿tres en uno¿, que significa que por un mismo cable o medio de transmisión se pueden enviar datos, voz y video.
En tal sentido, operadores de telefonía tradicionales y de televisión por suscripción van a competir para ser los primeros en ofrecer estos servicios.
Según Hermann Rodler, presidente para Latinoamérica de redes fijas de Siemens, el reto es transformar las redes actuales para que soporten de mejor manera la tecnología IP y así poder darle al mercado servicios de banda ancha.
¿IP no es solo un cambio de tecnología sino una transformación del modelo de negocios en el mercado de las telecomunicaciones. Los operadores tendrán que enfocarse en su negocio y repensar la forma como están funcionando¿, comentó el ejecutivo en una presentación para medios de comunicación en Rio de Janeiro (Brasil), a la que un periodista de EL TIEMPO asistió invitado por Siemens.
Por ahora, las telefónicas colombianas se han orientado en la convergencia de voz y datos, mientras que la parte de televisión la intentan vincular a su portafolio por medio de alianzas con operadores de cable.
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