Evaluación: ‘Soul’

En un año en el que nos tuvimos que saltar la mayoría de estrenos por culpa de la pandemia, es bueno saber que una de las mejores películas de 2020 estuvo al alcance de nuestra mano (siempre que tuvieras Disney+) ‘Soul’ es la producción más reciente de Pixar, el mismo estudio que se hizo famoso por construir estas historias animadas para hacer llorar a adultos (‘Toy Story’, ‘Wally’, ‘Intensamente’) y la segunda película (después de Mulán) en llegar directamente al servicio de streaming y saltarse las salas de cine.

La historia tiene como protagonista a Joe Gardner (Jamie Foxx), un músico que después de muchos años consigue cumplir su sueño y es seleccionado para tocar una presentación en un club de Jazz. Por desgracia, ese mismo día tiene un accidente en el que muere. Obsesionado con cumplir su sueño Joe viaja al lugar donde nacen las almas y conoce a 22, un alma atrapada que no ha encontrado la ‘chispa’ obligatoria para completar su viaje al mundo.

‘Soul’ cumple con las características que se esperan de una película de Pixar. El contar con una historia que intente hablar sobre el ‘significado’ de nuestra de vida parece ideal en un año como 2020. La historia tiene sus buenos momentos emotivos, aunque se siente más como un relato personal que un intento del estudio por hacernos soltar las lágrimas. De hecho, parece una cinta más dirigida a un público adulto que un filme para los más pequeños de la casa (aunque es 100% familiar).

Encontrando la chispa

Una de las cosas que siempre se ha admirado de las buenas películas de Pixar es su capacidad de hablar de temas complejos, en sus historias animadas. Esta viene a ser la mayor cualidad de ‘Soul’. La cinta tiene como tema y mensaje la idea de ‘nuestro propósito en la vida’. Joe, su protagonista, no solo se encuentra en la muerte con la perspectiva de una vida sin mayores logros o momentos brillantes, sino también de su obsesión con cumplir el ‘rol asignado’ de vivir por su amor a la música.

La historia entonces toma una ruta interesante y nos muestra a través de un viaje sorpresivamente sencillo en un tour por la vida de otras personas para darnos un vistazo a estas frustraciones. El amar algo pero quizás no poder cumplirlo, sino encontrar pasión en otras cosas. Es un viaje que, de manera extraña, se siente profundamente personal, pero nunca demasiado directo como para sentir que estamos en un seminario animado de autoayuda.

El viaje de 22 y Joe no tiene la escala de la odisea de ‘Buscando a Nemo’ o la tensión de ‘Intensamente’. Pero ahí está precisamente su potencia. Es ver la vida a través de estos personajes y reconocer en el espejo ciertas cosas, como quizás una frustración por encontrar un propósito fallido en nuestra existencia. ‘Soul’ no maneja esta pregunta con nihilismo, sino el realismo bello de las interacciones diarias.

“Vivir la vida” es una lección que no puede ser muy original en el cine, pero la manera en la que ‘Soul’ llega a esta conclusión tiene algo de novedad y, lo mejor, es la manera en la que llega a ella.

Definitivamente no para los más pequeños

Soul

Las películas animadas no películas infantiles. Es cómodo que en 2020 hayamos podido aceptar este hecho y dejemos de agrupar ambas en la misma categoría. Dicho esto, Pixar suele hacer intentos por ofrecer historias que estén en este rango de ser disfrutadas por los niños, pero tener la profundidad que los adultos sabrán encontrar. ‘Soul’ no pasa esta métrica y, a nuestro parecer, se decanta más por los más grandes del hogar.

Conceptualmente la película ya de por sí parece complicada de masticar para un niño. Tenemos conceptos del universo literalmente representados por voces británicas (lo cual suena perfectamente lógico, no quejas aquí). Una perspectiva sobre la vida, muerte y lo que conseguimos en ella. Historias de adultos que han tenido que renunciar a sus sueños por pagar facturas… no son precisamente temas que parezcan dirigidos a una audiencia infantil.

¿Quiere decir que ‘Soul’ es una película familiar con el síndrome del ‘Lorax’ (una película que encantó a los adultos pero aburrió a los niños a los 3 minutos)? Me atrevería a decir que no. La película sin duda puede ser disfrutada por los más pequeños, porque el estilo de animación de Pixar es divertido y la película utiliza su humor para seguir siendo entretenida. Pero la advertencia no está de más cuando algunas de las bromas incluyen la mención de figuras históricas.

El Jazz de la vida

Soul

Quizás uno de los logros más importantes de ‘Soul’ está en cómo captura el alma de la cinta y lo refleja de manera preciosa. Los colores utilizados en algunas de sus secuencias más profundas estallan en color y energía, con el jazz de la misma vida acompañando los movimientos de sus personajes. Es una historia que tiene esta capacidad de hacerte sentir bien. De entregar un mensaje y tono que se siente sanador en un año en el que algunos, con desesperación, necesitábamos una historia de este tipo entregada a domicilio.

Sí, la conclusión de ‘Soul’ no es espectacular. Pero la manera en la que se llega a ella sí lo es. Es un viaje placentero y en cierta manera sanador. Es probable que cada espectador se lleve esta escena en particular que le habló a su alma. En mi caso es el intercambio en la barbería que, de nuevo, no tiene de por si algún elemento impresionante, pero se siente como una de estas conversaciones que quieres escuchar para aliviar un poco el existencialismo de 2020.

Conclusión: un alma pura 4.5/5

‘Soul’ es una apuesta interesante, de un estudio que se anima a preguntar por el propósito de nuestra vida y nos da una respuesta que, si bien no es original (aunque quizás el existencialismo no sea el mejor tema para ser ‘original’) es entregada de una manera preciosa. Es posible que mucho del aprecio que tengamos de esta película provenga de su tono y mensaje que parecen ir acorde con un año particularmente difícil para muchos. Pero el crédito también está en una película que con su música, colores y voces es capaz de tocar el alma.

Jeffrey Ramos González

Jeffrey Ramos González

Mi papá quería que fuera abogado o futbolista. Pero en vez de estudiar o salir a la cancha, me quedé en la casa viendo 'Dragon Ball Z', jugando 'Crash Bandicoot' y leyendo 'Harry Potter'. Así que ahora que toca ganarse la 'papita' me dedico a escribir de lo que sé y me gusta. Soy periodista graduado de la Javeriana, escritor de ficción. He publicado en El Tiempo, Mallpocket, entre otras revistas.

View all posts

Archivos