Las películas biográficas generalmente buscan ganar nominaciones a diestra y siniestra en cuanto festival o ceremonia existe. Algunas lo logran, otras se quedan en meros intentos. Hay algo en la vida de figuras importantes que genera inspiración y admiración; y eso es material de drama y premios. Después de todo, la historia no se escribe basada solo en fechas y eventos, sino también, basada en personas.
Este año, las representantes de los ‘biopic’ –centradas en hombres de ciencia– en los Óscar son dos: ‘The Theory of Everything’ y ‘The Imitation Game’. Estas dos propuestas buscan contar la historia de figuras importantes en el campo científico. Ya vimos en ENTER.CO la evaluación sobre la primera película mencionada (la cual no nos convenció), y es el turno para ‘The Imitation Game’, que definitivamente es una propuesta más solida.
‘The Imitation Game’ narra la vida de Alan Turing, el padre de la computación moderna, quien junto a un equipo de matemáticos se dedicó a quebrar el código de la máquina Enigma, con el cual los nazis cifraban todas sus comunicaciones. La película es dirigida por Morten Tyldum, el hombre tras excelentes filmes como ‘Headhunters’ y ‘Buddy’.
Cumberbatch, lo hiciste de nuevo
Hace unos años, cuando Benedict Cumberbatch logró saltar a la fama con ‘Sherlock’, el clamor de sus fans era uno solo: queremos verlo en más cosas. Ahora el actor está prácticamente en todo. Desde sagas como el ‘Hobbit’ hasta dramas como ‘The Imitation Game’, y ahora será parte del universo de Marvel Studios con ‘Doctor Strange’. Pero a pesar de esa sobreexposición que estamos teniendo de Cumberbatch, el actor no ha perdido su toque y su papel como Alan Turing demuestra que su versatilidad en pantalla es su mayor fortaleza.
Cumberbatch hace lo que todo actor principal de ‘biopic’ debe hacer: llevarse las miradas, ser el centro de atención y sostener de forma positiva el filme. Independiente de las típicas críticas que llegan cada vez que se estrena una película biográfica (por ejemplo: no se parece tanto o ‘fulanito’ no hacía eso o aquello), lo cierto es que el Turing de Cumberbatch es un personaje desafiante, que en medio de su pedantería, es un hombre que terminamos apreciando a través de cada gesto y actitud del actor.
A través de la película, Turing se presenta como un genio arrogante y una persona supremamente difícil. Pero a medida que avanza la trama y conocemos momentos de su infancia –hay que señalar que el joven Turing interpretado por Alex Lawther no lo hace nada mal–, el protagonista se hace cada vez más humano y frágil. En ese punto, la interpretación de Cumberbatch llegará a los mejores momentos.
No recordaba a Kiera Knightley
La actriz Keira Knightley no ha tenido los mejores papeles en su filmografía, pero tampoco ha tenido una carrera plagada de desastres. Su trabajo tiene altos y bajos: a pesar de personajes olvidables en ‘Piratas del Caribe’, ‘Jack Ryan’ o ‘Buscando un amigo para el fin del mundo’, la actriz también ha hecho lo suyo en filmes como ‘Un Método Peligroso’ y, ahora, ‘The Imitation Game’. Debo confesar que, personalmente, nunca he apostado mucho por Kiera. Pero nada mejor que una película que te cierra la boca.
Knightley interpreta a Joan Clarke, quien fue compañera y esposa de Turing. La actriz sabe cómo poner en pantalla a una mujer que vive en los tiempos que vive, en los que el machismo es fuerte y las oportunidades están lejos de ser iguales. Antes no recordaba a Knightley, más allá de alguna repetición de ‘Piratas del Caribe’, pero en definitiva espero que continúe en este camino de sorprendernos.
El resto del elenco, con Matthew Goode, Mark Strong y Rory Kinnear, entre otros, es el grupo justo para darle el tono que necesita la película: actores serios y –por supuesto– con carrera en filmes nominados.
Desde la guerra
Aunque ‘The Imitation Game’ es una película ambientada en la Segunda Guerra Mundial, se siente distinta a lo esperable del género. Lejos de las batallas, la guerra de la historia se vive de forma notoriamente diferente. Esto permite que la película no sea solo un drama, también tenga tintes de ‘thriller’.
El ritmo de varios aspectos de la trama nos hará sentir que ‘The Imitation Game’ también tiene elementos de un filme de espías. Esa diversidad de géneros que nos entrega el guión es bastante entretenida. No estamos sentados viendo solo el pasado de alguien, sus dramas y los problemas de una época; también vemos una trama con sus giros y tensiones al estilo de un ‘thriller’.
‘The Imitation Game’ muestra una guerra muy distinta, representa hechos que por mucho tiempo fueron secretos. Pone en pantalla un grupo de personas que le dieron la vuelta a una época de la historia humana. La película sabe rescatar eso y darle la importancia necesaria. Es un desagravio para Turing, un hombre que hizo tanto y terminó su vida de forma tan trágica.
Los logros como deben ser
Un buen ‘biopic’ debe saber transmitir a su público los logros de su protagonista. No debe tratarlos de forma leve y sin profundizar. En cambio debe agregarlos al guión, de forma astuta, entretenida, sin que se sientan demasiado densos. ‘The Imitation Game’ logra justamente eso. Los orígenes de la computación y los esfuerzos por descifrar códigos no se quedan en diálogos que no se entienden y son tediosos. En la película estos temas crean tensión y emoción, e incluso arman el ritmo del filme.
Cuando los créditos corran, probablemente terminarás apreciando los logros de este grupo de personas. Eso ya es una victoria para el filme. Quizás ya conoces esa parte de la trama, y de todos modos, está en los libros de historia y en internet. Pero ‘The Imitation Game’ no solo hace que entiendas su importancia, sino que la sientas. Convertir esos datos en historias es un proceso complicado, pero cuando el resultado es un producto como esta película, el esfuerzo vale la pena.
Pero así como los logros quedan bien plasmados, los fracasos de la época también están en la cinta. Las leyes antihomosexuales, que terminaron por sepultar a Turing, son otra parte importante de la trama, que siguen agregando partes a la compleja historia del filme. Pero, aunque ‘The Imitation Game’ puede manejar varias subtramas, eso no quiere decir que pueda darles la importancia necesaria a todas.
Pero…
Aunque ya le lancé flores a Knightley, desgraciadamente su personaje no sale muy bien librado. La actuación es excelente, pero el guión queda debiendo. Joan Clarke tiene su importancia en el filme, pero su papel desmejora a medida que avanza la película. Realmente no logramos sentir que ella y Turing sean tan unidos como la película intenta venderlo. Los momentos en que entran en colisión no están bien desarrollados, y tienen consecuencias que no aportan lo necesario a la trama.
También hay que sumar que, en las contadas escenas de guerra, la producción se queda corta. Hubiese sido preferible seguir otra línea o simplemente descartar esas secuencias.
A pesar de esto, ‘The Imitation Game’ es –sobre todo– un gran ‘biopic’. Sabe transmitir los logros de su protagonista, logra hablar de ciencia de forma entretenida, sabe construir momentos emotivos y, finalmente, nos hace apreciar el fragmento de historia que rescata.
Imagen: Página oficial de la película.