Luego de una década lejos de la silla del director, Mel Gibson está de regreso. Sus anteriores filmes fueron ‘Apokalipto’ y ‘La pasión de Cristo’, películas que comparten dos elementos clave: violencia y argumentos de época. Gibson gusta de visitar otros momentos del tiempo y su nuevo filme es justamente eso: ‘Hasta el último hombre’ es un largometraje ubicado en la Segunda Guerra Mundial.
El filme cuenta la historia real de Desmond Doss, un pacifista que se enlistó en las filas del ejército para hacer su parte en la Segunda Guerra Mundial. Como pueden darse cuenta, las dos ideas son contrarias: pacifismo y guerra no van de la mano. Justamente en eso se basa el drama del filme, con Doss sobreviviendo a la decisión que tomó.
¿Es ‘Hacksaw Ridge’ (‘Hasta el último hombre’) una de las mejores nominadas al Óscar? En este punto solo me falta ver una de las nominadas, son exactamente nueve películas y sabía que al menos una no sería de mi agrado. Al menos una sería la ‘Brooklyn’ (2016), ‘The Theory of Everything’ (2015), ‘Nebraska’ (2014), ‘Lincoln’ (2013) de este año: ese filme nominado que simplemente no aprecio al nivel que lo hace la crítica.
‘Hacksaw Ridge’ no es una mala película, pero está cubierta de una molesta tónica que afecta todo lo que narra.
El estilo Gibson
Como película de guerra ‘Hacksaw Ridge’ encontró en Gibson un director increíble. El reconocido actor es un maestro de la violencia, algo que pone de una forma impresionante en la pantalla grande. La película no se guarda ningún momento cruel de la guerra, después de todo estamos viendo a dos naciones usando todos sus recursos para terminar una con la otra.
Las vísceras, sangre, golpes y explosiones están a diestra y siniestra. Pero hay una diferencia con algunos filmes de violencia desmedida: en medio de su gran narrativa encuentras el sentido narrativo a todo ese horror.
El filme es la visión de Doss, un pacifista, sobre la vida. Los horrores son más crudos y la violencia más impactante. Por ello, la habilidad de Gibson tras la cámara para retratar todo esto es perfecta para la película. Es un espectáculo ver el trabajo del reconocido actor en la silla de director. Como película de guerra ‘Hacksaw Ridge’ hace bien su trabajo desde lo visual y la violencia.
Blindado
Así como la visión pacifista de Doss y la guerra no van de la mano, también se chocan la crudeza del filme y la presentación de su protagonista. Esa es la tónica que a mi visión le hace daño al filme: Doss es perfecto, moralmente impecable y el mejor ser humano.
Doss fue una persona real y, como tú o yo, las personas reales estamos lejos de ser perfectos y puros. El filme solo se centra en eso, en un personaje demasiado puro, poco creíble. Por supuesto es un héroe, que solo buscó ayudar a otros y no quitar ninguna sola vida en medio de una terrible guerra. Es una historia de vida aplaudible, pero presentarlo extremadamente bueno no funciona, daña el tono y tu capacidad de reflejarte en la trama.
El personaje interpretado por Andrew Garfield puede pasar de ser un héroe que admiras, a ser simplemente un poco insoportable en medio del aura que el guion y la película quieren ponerle. La profundidad moral cae en hombros de otros personajes, como Tom Doss, el padre de Desmond.
¡Japs!
La tónica de Doss, aquella con la que el filme quiere recalcar que algo es ‘increíblemente bueno’, se transporta a otros temas de la película. A veces parece que la visión de Gibson también quería hacer un recuerdo a la propaganda: los japoneses son unos monstruos, sedientos de sangre y que se alimentan de muerte.
Aquí quiero recordar el excelente experimento de Clint Eastwood con ‘Cartas desde Iwo Jima’ y ‘La bandera de nuestros padres’, dos filmes en los que Eastwood contó la historia de los dos bandos: los estadounidenses y los japoneses. La guerra, vista desde un tercero, son dos territorios con razones propias para entrar a un conflicto bélico. ¿Puedes hacer eso en todas las películas de guerra? Por supuesto que no, pero deshumanizar de la forma más simple a un bando también es perezoso.
A la larga parece que los japoneses son un grupo de monstruos, pero los estadounidenses son héroes sin mancha, con Doss a la cabeza de esa representación. Soy fanático de las historias bélicas, desde cómics de Garth Ennis, pasando por el trabajo mencionado de Eastwood, hasta videojuegos como ‘Battlefield 1’, así que, cuando me encuentro con este tipo de fórmulas, las siento sin profundidad.
El ‘espectáculo’ de la guerra
Ante todo, ‘Hacksaw Ridge’ es un filme de guerra y visualmente es todo lo que podrías desear. Es crudo, es real, es violento y pesado. Gibson (de nuevo) es el director ideal para este filme. También el reparto es sólido y funciona para la trama. No es un mal filme, está lejos de serlo, pero en la gran imagen siento que su tono puede dañar la película de forma considerable: su protagonista es demasiado ‘perfecto’, su representación del enemigo es simple y esa profundidad, de lo creíble, es necesaria pero aquí no existe.
Imágenes: Summit Entertaiment.