El jefe de presupuesto de Estados Unidos le solicitó al Congreso de este país tiempo para que las empresas estadounidenses que hacen negocios con Huawei puedan hacer los cambios pertinentes, especialmente aquellas que tienen contratos con el Gobierno. De este modo, la Oficina de Presupuesto de la Casa Blanca habría recomendado por lo menos dos años de ajuste para que las compañías puedan acogerse a la regla sin inconvenientes, informó Reuters.
El presidente Trump acusó en múltiples ocasiones a Huawei de espionaje y robo de propiedad intelectual, por lo que la puso en la lista negra del Departamento de Comercio. La empresa de telecomunicaciones ha asegurado en repetidas ocasiones que no es controlada por el gobierno chino y que no le presta servicios de inteligencia o militares. De hecho, hace poco decidió poner en manos de la justicia estadounidense la decisión del presidente Trump.
Ahora, la Oficina de Presupuesto de la Casa Blanca recordó que el año pasado se firmó una orden en la que se prohibía invertir presupuesto de las agencias federales en contratos o en la compra de productos Huawei, llamada Acto de Autorización de Defensa (NDAA, por sus siglas en inglés). Pero este entró en vigencia hasta este año y afectará también a las empresas que hacen contratos con instituciones del Estado, explica The Guardian.
El jefe de presupuesto de Estados Unidos explica, a través de una carta enviada a los líderes del Congreso y al vicepresidente de E.U., Mike Pence, y a la que tuvo acceso Reuters, que estos dos años serán necesarios para «asegurar que las compañías estadounidenses que tienen negocios o que trabajan con el Gobierno o han recibido préstamos federales tengan tiempo de poner fin a sus acuerdos con Huawei y cualquier otra compañía china que haga parte del NDAA».
Vocero de la Oficina de Presupuesto de E.U. llama a pensar en las consecuencias del veto a Huawei
Russ Vought, vocero de la Oficina de Presupuesto de E.U., aseguró en su carta que, además, los contratistas del gobierno deberían tener una extensión de cuatro años del veto en lugar de dos años. De este modo, podrían pensar en las consecuencias de sus asociaciones y buscar soluciones.
Además, Vought aseguró que este tiempo o demora en la prohibición asegurará que el veto pueda ser reglamentado de manera adecuada sin comprometer los objetivos de la seguridad nacional. Así mismo, llamó la atención en que, después de que estas entren en vigencia, habrá una «reducción dramática» de los contratistas que pueden venderle al gobierno de Estados Unidos y cumplir con sus expectativas en el tiempo esperado.
Por último, el diario Wall Street Journal aseguró que el tiempo otorgado no afectaría o detendría el veto que Huawei tiene al haber sido puesta también en la «Lista de entidades». Esta lista le prohíbe a la empresa comprar piezas y equipos de firmas estadounidenses sin la aprobación del gobierno de E.U.
Imágenes: Montaje ENTER.CO, Huawei Press y Rawf8 (vía iStock).
