Así le cambió la vida al ‘innovador del año’ tras recibir el premio del MIT

El año pasado, el emprendedor Alexander Torrenegra fue reconocido por el MIT Technology Review como el mejor innovador colombiano menor de 35 años. Desde entonces, y gracias al premio, Torrenegra ha pasado por muchas cosas que le han permitido progresar no solo como empresario tecnológico, sino también como impulsor del emprendimiento. 

«Es una de las mejores cosas que me ha pasado en mi vida profesional«, dice Torrenegra sobre el reconocimiento. Este le ha permitido convertirse en una especie de figura pública, con interlocución con el gobierno, los medios de comunicación y la comunidad tecnológica en Colombia y Silicon Valley.

Gracias a él, dice, pudo «entrar a una red y a un club de gente muy ‘pila’ de la que puedes aprender mucho«, a la que pertenece la élite global de la industria tecnológica y de innovación. También le ha permitido conocer e interactuar con y aprovechar nuevas oportunidades, que van desde entrar a eventos a los que de otra manera le habría sido muy difícil asistir, hasta convertirse en un empleador más atractivo y con mayor capacidad de atraer talento.

«La gente ‘pila’ es amiga de gente ‘pila’; y cuando tienes diez personas tan ‘pilas’ compartiéndoles a sus amigos las necesidades que tienes, llegas a redes impresionantes de personas a las que de otra manera sería imposible llegar«, explica.

Al mismo tiempo, su nombre comenzaba a ser conocido y a salir cada vez más en medios en Colombia y Estados Unidos. Tras recibir el premio, fue contactado por Catalina Ortiz, directora de iNNpulsa, la rama del Ministerio de Comercio encargada de promover el emprendimiento en el país. Eso llevó a que Torrenegra, junto a otros líderes del emprendimiento en el país, se reuniera con el presidente Juan Manuel Santos para discutir políticas sobre el tema.

Por la misma época, Forbes destacó a Torrenegra Labs –una de las empresas que fundó– como una de las 10 mejores startups fundadas por inmigrantes en Estados Unidos. Gracias a todo eso, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se reunió con él para discutir la reforma migratoria en ese país. «Esto se convirtió en una bola de nieve que, de no haber sido por los premios TR35, posiblemente nunca hubiera ocurrido«, dice.

Pero al lado de estas ventajas, también viene una gran responsabilidad. Torrenegra asumió el reconocimiento como un llamado a promover el emprendimiento en el país. «Habernos ganado el premio es también una forma de respaldar los esfuerzos que ya estábamos haciendo» en ese sentido, dice. «De no haber sido por eso, no nos tomarían tan en serio como nos están tomando hoy en día«.